La meditación trae una gran cantidad de beneficios para la salud física y mental, pero la mayoría de personas que aún no la practican suelen hablar de la falta de tiempo o que nunca encuentran el momento ideal para experimentarla.
Pero, es necesario siempre separar un espacio a solas y 100% dedicado para meditar para poder llevarlo a cabo? No, es posible incorporar la meditación a múltiples actividades en el diario vivir para
equilibrar nuestra mente y pasarla bien incluso en los momentos agitados.
A continuación algunas maneras de hacerlo:
1- Mientras se camina: A diario nos tenemos que desplazar de un lugar a otro, pero podemos concentrarnos en un objeto a la distancia, manteniendo la mirada fija para evitar distracciones. Debemos concentrarnos en la respiración, centrarnos en los sonidos y explorar los más bonitos o relajantes que nos parezcan, o portar con nosotros un reproductor de música. Podemos mirar los colores que nos llamen más la atención y dejar que el
viento nos acaricie, siendo conscientes de cómo nos recorre a cada segundo.
2- En el transporte público: Estar en un espacio cerrado de este tipo hace más fácil el concentrarnos a pesar de estar rodeados de muchas personas. Siendo menor el movimiento podremos centrar nuestra mente en nuestra propia respiración y en sonidos del exterior que nos parezca más reconfortantes.
3- En el trabajo: Es necesario que cuando se sienta demasiado peso por todo el tiempo invertido en la oficina, se saque unos minutos para descargar nuestra mente del estrés concentrado, solo es necesario cerrar nuestros ojos, ponernos los audífonos y reproducir música relajante o sonidos naturales que pueden encontrarse en internet. Cerrar la puerta de la oficina será una buena opción para evitar interrupciones imprevistas. Sin duda alguna serás más productivo en tus tareas si lo practicas cada que tu cuerpo y mente lo pida.